¿Manejo de políticas públicas o dictadura democrática durante la pandemia del Covid-19?

Las políticas públicas, son parte esencial del diario y constante manejo de una nación, pues a través de estás el estado ofrece soluciones a los problemas que se enfrenta la sociedad a nivel económico, político y social, sin estás seria imposible lograr un optimo desarrollo como país. Es por ello que durante una crisis sanitaria de tal magnitud como ha sido la pandemia del Covi-19, es de vital importancia una correcta implementación de estás políticas, puesto que es el único medio que posee el estado de garantizarnos a nosotros como población una mitigación eficaz ante el Covid-19. 

República Dominicana no ha sido la excepción a esta crisis y si bien es cierto que el estado con los recursos a su disposición ha implementado políticas públicas útiles y sostenibles que han sido de gran ayuda, como son los programas “Quédate en casa”, “Fase 1 y 2” , “Comer es primero”, entre otros, que han sido un soporte a las personas con menos acceso a recursos económicos o que fueron suspendidos temporalmente de sus trabajos, para suplirse de los bienes básicos como lo son alimentos y medicamentos; sin embargo, así mismo han recurrido a otras medidas como “el toque de queda” y “el estado de emergencia”. Pese a no ser malas medidas para mitigar los efectos del virus, han sido implementados de manera errónea, convirtiendo lo que debía ser una excepción en la cotidianidad.

 Estás últimas medidas han logrado el efecto contrario y han sumergido a la población en una crisis que a largo plazo podría ser mucho peor que lo que enfrentamos en la actualidad. Un toque de queda que buscaba la retención de las personas en sus hogares en horarios donde más posibilidades existían de convivencia se ha vuelto un punto a favor del Covid-19, puesto que a la salida de los trabajos tanto en las calles como en el transporte público vemos las grandes aglomeraciones de personas, lo que facilita la transmisión del virus; siguiendo la misma línea, este a su vez obliga a los dueños de pequeñas y grandes empresas a cerrar sus puertas en horarios anticipados, lo que afecta de manera directa a la economía nacional y de cada empleado y por supuesto este afecta de manera directa y en mayor medida a los trabajadores independientes.

Estas medidas se han vuelto el diario vivir de una nación que busca salir de todas aquellas crisis que la arropan en todos sus aspectos y si bien es cierto que es de suma importancia luchar contra esta enfermedad que nos agobia, el bienestar de nosotros como sociedad posee la misma importancia y en definitiva la mala implementación de las medidas no están sirviendo más que para seguir creando crisis sobre crisis.

En síntesis, requerimos políticas públicas que no sean autoritarias e inservibles, necesitamos políticas públicas sostenibles y eficaces, que posean la capacidad de ofrecernos seguridad económica y social, pero sobre todo que no distinga entre nuestra raza, color, género, religión y más importante, nuestro estatus económico.

Wanda Paula.